viernes, 27 de noviembre de 2009

Ciclo de la vida



Se preguntaba porque era tan agotadora la tarea encomendada si, al fin y al cabo, su cuerpo era fuerte y ágil para poder cargar con ella. Pasaban las horas y el cansancio se apoderaba de ella, una bruma en su mente hacía disuadir su atención hacia aquel horizonte cada vez menos lejano, y entonces, dio un paso más y frenó,descargó aquel peso y cabizbaja observó sus pies descalzos y ennegrecidos,las palmas de sus manos rotas del tiempo, y alzó su vista hacia las nubes que se agrupaban formando girónes por encima de su cabeza.
El viento dejo de soplar y un silencio casi estremecedor aprovechó para devolverle la lucidez que necesitaba. En aquel instante comprendió que su ardua tarea no fue dispuesta hacia horas, sino años en los que el tiempo había transcurrido tan rápido que había perdido la cuenta. Por fin entendió que su meta no era otra que recorrer ese camino fundiéndose con aquellas fieles compañeras, las nubes, difuminandose en el cielo hasta el infinito.



"De un tiempo a esta parte
el infinito
se ha encogido
peligrosamente.

Quien iba a suponer
que segundo a segundo
cada migaja
de su pan sin limites
iba así a despeñarse
como canto rodado
en el abismo." (La poesia es de Mario Benedetti)

3 comentarios:

Saltinbanqui dijo...

Mario siempre tan acertado.
Tu tambien.
:)

1600 Producciones dijo...

Muy bueno!!! Me gustó mucho.

Saludos

Kimi dijo...

Hola! me gustó tu blog y te seguiré leyendo :)

Muy bonito el texto y la poesía =)

bss =)